Con Gradient Canopy, un objetivo era desarrollar un sitio de proyectos que se integrara con el paisaje y mejorara su resiliencia con el tiempo. Para nosotros, “resilientes” son aquellos lugares que contribuyen a la salud ecológica de la región a largo plazo, donde tanto las personas como la vida silvestre pueden prosperar a pesar del cambio climático. En Gradient Canopy, trabajamos para recuperar elementos históricos del ecosistema fundamentales para conservar la vida silvestre. Sin embargo, entendemos que existen peligros para esa vida en un entorno urbano, sobre todo para aves como los pájaros cantores, los gorriones, los colibríes y las currucas, por lo que diseñamos Gradient Canopy con varias estrategias que tenían en cuenta a las aves.
El vidrio de los edificios puede tener un grave impacto en las poblaciones de aves, por lo que era importante diseñar el edificio, el paisaje y la iluminación de Gradient Canopy en cumplimiento del LEED Innovation in Design Credit: Bird Collision Deterrence para minimizar las colisiones de aves con el edificio.
Para saber cuál era la mejor manera de incorporar elementos de diseño seguros para aves, trabajamos con la consultora ecológica H.T. Harvey & Associates para seguir estándares y recomendaciones líderes en la industria en cuanto a edificios seguros para estos animales. En Gradient Canopy, incorporamos dos medidas de diseño seguro para aves: la primera fue reducir el reflejo y la transparencia de los vidrios del edificio, y la segunda fue reducir la contaminación lumínica nocturna a través de soluciones de iluminación interior y exterior.
Aunque el vidrio es invisible tanto para aves como para seres humanos, nosotros aprendimos a verlo con el tiempo a través de pistas visuales como los marcos de las ventanas y los reflejos. Las aves, por el contrario, tienen poca percepción de profundidad y suelen percibir los reflejos del paisaje o el cielo como si fueran reales. La transparencia del vidrio también puede producir colisiones si un ave ve plantas interiores o vegetación a través de las esquinas del vidrio. En esencia, cuanto más visible sean la vegetación o el cielo en un vidrio, ya sea por transparencia o reflejo, más posibilidades hay de incidentes o colisiones de aves.
En Gradient Canopy, nuestra primera solución fue obtener vidrio con un bajo índice de reflejo. Los avances recientes en tecnología y producción de vidrio facilitan la obtención de un nivel de reflejo menor sin sacrificar la ganancia de calor solar, lo que nos ayudó a conseguir un vidrio mejor para las numerosas ventanas y fachadas de la edificación. Por otro lado, gracias a la implementación de marcas en el vidrio muy próximas entre sí y visibles, como calcomanías y frita en cerámica, pudimos reducir significativamente la mortalidad en las aves, ya que pueden percibir las marcas como obstáculos y no intentan volar hacia los vidrios. Elegimos un denso patrón de marcas en cumplimiento de la guía más reciente de American Bird Conservancy, que busca proteger hasta a los colibríes más pequeños. En Gradient Canopy, diseñamos la frita en las áreas públicas en forma de rompecabezas del mundo, en el que están impresos juntos los nombres de 30 especies de aves locales distintas, en 30 idiomas. Es un “huevo de pascua” que le da un toque divertido y de descubrimiento a un elemento de diseño seguro para aves altamente funcional.